jueves, 29 de octubre de 2015

El azúcar: regular sin eliminar

El azúcar

Regular sin eliminar



Hay ciertos momentos en la vida de las personas, en los que paramos a pensar: ¿me estoy cuidando? ¿El hecho de no tener “kilos de más” es por lo tanto estar sana?


En ese momento, empecé a pensar fríamente en la alimentación que estaba llevando y algo en mi cerebro hizo “clic”... ¿Realmente cuido mi alimentación? Y encontré una respuesta: no.

Siempre he sido rigurosa con el deporte pero me di cuenta de que, a pesar de llevar una alimentación equilibrada, no controlaba lo que comía, haciendo especial hincapié en el azúcar:
   “El azúcar es necesario en mi día a día”

Así pues, empecé a reducir todos aquellos alimentos que claramente contienen azúcar.
El consumo de dulces, bebidas azucaradas, mermeladas y helados comenzaron a pasar a un segundo plano en mi día a día.
En un principio, lo que más duro me resultó evitar fue la Coca-Cola.

Pero siendo realista, aprovechaba cualquier oportunidad para saborear ese “trocito de cielo”, así que pensé que lo mejor, simplemente sería regular sin eliminar.





Aun así, noté un gran cambio, sobre todo enfocado al deporte.
Sustituí los azúcares de los dulces, por los azúcares “sanos” de la dieta diaria, los cuales me daban mucha más energía y me hacían sentir mejor.


Otro de los efectos beneficiosos que pude comprobar en mi día a día fue ir notando que cada vez dormía mejor, ya que desde siempre he tenido problemas con el sueño. Comencé a investigar hasta caer en la cuenta de la gran relación que tenían los azúcares y los problemas para dormir.


¿Conclusión? Tanto la supresión como la ingesta abusiva del azúcar tenían efectos negativos en mi. 

Busca el equilibrio, tanto en la alimentación como en la vida cotidiana, es lo más sano que le podemos ofrecer a nuestro organismo.


Esta decisión la tomé al igual que muchas otras personas que incluso, llevaron esta situación de forma más radical. 
Es el ejemplo de la familia estadounidense, que decidió eliminar por completo todos los azúcares, tanto los que se encontraban en la bollería, pastelería y refrescos, como los que se encuentran en nuestra dieta diaria.

No daban crédito al comprobar que la mayoría de los alimentos que compramos y consumimos llevan cierto aporte de azúcar.

Así fue su experiencia, publicada por Cristian González en Eltiempo.com







4 comentarios:

  1. ¡Muy bien, compi! Ya sabes que soy enemiga acérrima del azúcar, así que te apoyo a tope. Una entrada muy interesante.

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  2. Me alegro mucho de que te parases a reflexionar un poco sobre el tema, yo la verdad eliminé por completo el consumo de azúcar refinado y no compro productos que lo contengan y estoy muy contenta. Me ha mejorado la salud y el estado de ánimo. Seguro que con esta reflexión consigues inspirar a los demás:)

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